El lector de árboles

Las plantas son un buen indicador de las condiciones ambientales del lugar donde viven. Los árboles, además, conservan esta información a lo largo de toda su vida en su porte y en su madera, donde los anillos de crecimiento nos permiten poner fechas a los momentos más cruciales de su vida. El lector de árboles no es una publicación para especialistas, es más bien un libro pensado para personas con tiempo y curiosidad, que disfrutan observando y comprendiendo la naturaleza.

En un inicio repasamos lo que es un árbol y cómo es su crecimiento para continuar explicando cómo podemos reconocer características significativas que nos ayudarán a comprender su aspecto, principalmente, en el tronco y en la copa.

En una segunda parte del libro, el tratamiento es desde el territorio en el que viven, cómo este influye en el crecimiento y cómo podemos obtener información valiosa sobre un determinado lugar. Por ejemplo, no solo nos permite identificar las zonas de riesgos naturales, sino también conocer su intensidad y frecuencia. Y como en un mismo árbol se pueden juntar varias características que son consecuencia del medio en el que viven, y como con la información de sus anillos de crecimiento podemos situarlas, además, en el tiempo, podemos ponerles fecha e ir reconstruyendo cada cuanto se producen determinadas perturbaciones.

Del libro han escrito: «Hay tanta información en El lector de árboles, que tras su lectura uno podrá entablar conversación con estas magníficas criaturas y ver sus adaptaciones a la luz, al suelo, el agua, la colaboración o el ataque de hongos, de animales; la fuerza del viento, del fuego o del ser humano... La editorial Prames ha editado una magnífica guía. Ya no caminaremos simplemente bajo los árboles, sino junto a los árboles. Y desearemos con todas las fuerzas que los brinzales (arbolitos nacidos de las semillas) o los chirpiales (los brotes de la cepa o raíces) se hagan grandes y cuenten su historia, la nuestra también, a las generaciones futuras y a los amantes de los árboles», (Manuel Padilla Santos).